LABORATORIO DE URGENCIAS

Antígeno Carbohidrato 125-Predicción del Riesgo de Mortalidad Post Infarto Agudo de Miocardio

                                                                                                            Felipe Falcao; Flávio Oliveira; Dário C. Sobral Filho, et al,                                                                                                                            (Universidad de Pernambuco en Brasil)

                                                                                                                                     Científic Reports, julio de 2020; 11016

                                                                                                                                             Resumido por: Jasser Cantrell

El infarto de miocardio con elevación del segmento ST (STEMI) es un trastorno potencialmente mortal con alta morbilidad y mortalidad a pesar de los avances en el tratamiento. Los pacientes que presentan STEMI tienden a ser heterogéneos y la estratificación inmediata del riesgo en el momento de la presentación es esencial para un tratamiento óptimo.
Se ha demostrado que los marcadores de congestión e inflamación, como los péptidos natriuréticos (NP) y la proteína C reactiva de alta sensibilidad (hs-CRP), son marcadores de pronóstico. Sin embargo, los biomarcadores actualmente disponibles no son perfectos y su correcta interpretación requiere una cuidadosa consideración del escenario clínico específico.
Los estudios de biomarcadores han arrasado en el campo del diagnóstico en las últimas décadas. Muchas enfermedades tendrán perfiles genéticos, químicos o proteicos únicos. Los biomarcadores cardíacos existen desde la década de 1970 y se utilizan para obtener el diagnóstico o pronóstico de un paciente. Con cualquiera de los dos, el riesgo de mortalidad de un paciente se reduce considerablemente. No todas las enfermedades cardiovasculares se pueden tratar de la misma manera, por lo que es imperativo que las pruebas avancen.
El infarto de miocardio con elevación del segmento ST (STEMI) es un trastorno potencialmente mortal con alta morbilidad y mortalidad a pesar de los avances en el tratamiento. Los pacientes que presentan STEMI tienden a ser heterogéneos y la estratificación inmediata del riesgo en el momento de la presentación es esencial para un tratamiento óptimo. Infarto de miocardio con elevación del segmento ST (STEMI), teniendo en cuenta la naturaleza repentina de la mayoría de los ataques cardíacos, tiene una alta tasa de mortalidad.
Los biomarcadores de congestión e inflamación han demostrado ser útiles en las pruebas de diagnóstico, pero siguen siendo imperfectos. Se ha demostrado que los marcadores de congestión e inflamación, como los péptidos natriuréticos (NP) y la proteína C reactiva de alta sensibilidad (hs-CRP), son marcadores de pronóstico. Los biomarcadores actualmente disponibles no son perfectos y su correcta interpretación requiere una cuidadosa consideración del escenario clínico específico5
El biomarcador cardíaco antígeno carbohidrato 125 (CA125). Ya se conoce la asociación del CA125 con la insuficiencia cardíaca, pero aún se desconoce su papel en el STEMI.

Las investigaciones comenzaron recopilando datos de un grupo de pacientes que ingresaron con STEMI. Utilizaron otros dos biomarcadores líderes para el pronóstico de STEMI, NTproBNP y hs-CRP, para comparar los resultados de CA125.
Los datos mostraron que la edad, la congestión y la frecuencia cardíaca correspondían a un mal pronóstico.
El antígeno carbohidrato 125 (CA125) es un biomarcador de congestión e inflamación. Ha sido estudiado en pacientes con enfermedades cardíacas, especialmente insuficiencia cardíaca6.
Este estudio se propuso evaluar la relación entre CA125 y la mortalidad en pacientes con STEMI en comparación con el propéptido natriurético cerebral N-terminal (NTproBNP) y hs-CRP.
La relación precisa entre CA125 elevado en pacientes con STEMI y eventos cardiovasculares aún no se ha estudiado suficientemente.
Centrándonos en CA125, hubo una clara correlación con la mortalidad. Los pacientes ingresados en el hospital con niveles elevados de CA125 tenían un mayor riesgo de mortalidad después de seis meses.
CA125 se desempeñó de manera similar a NTproBNP y hs-CRP, lo que infiere que los biomarcadores de inflamación y congestión en su conjunto pueden tener importancia pronóstica. Si bien no superó a ninguno de los otros biomarcadores, también funcionó.
Este estudio confirmó la importancia del CA125 en el pronóstico del STEMI. 
Los pacientes con niveles más altos de CA125 tenían más probabilidades de tener un pronóstico desfavorable. Estudios futuros pueden encontrar que CA125, junto con varios otros marcadores, podría crear una herramienta de diagnóstico mucho más poderosa. Cuanto mejor sea la herramienta de diagnóstico, mayores serán las posibilidades que tendrán los pacientes.

Conclusión:
* Este estudio sugiere que los niveles elevados de CA125 podrían usarse para identificar a los pacientes con STEMI con un mayor riesgo de muerte a los 6 meses.
* CA125 parece ser un predictor de mortalidad similar en comparación con NTproBNP y hs-CRP.